luna-gitana

La Luna no duerme, engaña al sol. Se suelta el pelo de noche despejada y maquilla el negro de sus ojos con estrellas.
Se viste con falda de gitana, para tongonear su paso liviano sobre papel urbano. Despierta noches hechizadas con su mirada fija-(línea) de palabras dispersas en el aire que la baña y ella gitana al fin las agarra.
Roba un suspiro en metáfora.
De uno que otro beso extrae verbos.
De un minuto obtiene un verso.
Entre el humo descubre el silencio y lo guarda en su cuerpo de Luna-gitana. De noche-día, de poesía sin reglas.
Como la noche.
Luna, pluma-tinta; libertad que la lleva a encorvarse sobre su manto estrellado, gitana enciende un cigarrillo y te observa. Tan perversa como humana, en las noches de estrellas o en sus días de poeta escribe tu historia, la mía y la de otros.


D.A. Luis Daniel Arrufat-Elias